
Con el correr de los años, la Ciudad de San Juan
Bautista de la Rivera de Londres, nacida poco menos que moribunda en los
pedregales del actual Pomán, vino a mostrarse ridícula con aquel pomposo
título. En tanto la Población del Valle crecía a la sombra de su ya segunda
Iglesia Santuario en honor a la venerada Imagen de Nuestra Señora del Valle.
Por: Pbro. Alberto S. Miranda
CIUDADES
Con respecto al título de ciudad, para mayor claridad
conviene transcribir, lo que en documentos investigados sobre el tema se
explica: "Ciudades, se llaman hoy en día a las poblaciones considerables
por el número de habitantes; pero en la época colonial, el vocablo ciudad significaba
principalmente Capital de Jurisdicción y desde el mismo día de su fundación,
aun antes de que tuviera casa alguna, desde el momento en que el fundador
declaraba que en tal asiento fundaba la ciudad, allí existía ésta, porque tal
era el asiento legal de sus autoridades, la ciudad era por consiguiente
anterior a la población efectiva, al caserío ... ".
El fundador delimitaba al mismo tiempo los límites de
la nueva jurisdicción, es decir creaba la nueva provincia cuya capital acababa
de fundar. En el centro de la Plaza (lo que había de ser la plaza) se colocaba
el rollo o árbol de justicia, que era una columna o palo en que habían de ser
ejecutado los criminales; y que constituía el símbolo permanente de la
jurisdicción de la ciudad "porque sólo en las capitales podría ser
aplicada (y cumplida) la pena de muerte".
Ya se dijo como aquella ciudad de Londres languidecía,
pero el fin, al parece estaba próximo, por la fundación de la actual ciudad de
Belén, llevada a cabo por el Cura de la misma jurisdicción eclesial del hasta
entonces Curato de Londres, Maestro Don Bartolomé de Olmos y Aguilera, "en
1678 el Gobernador Garro le concedió la merced de tierras, reunió algunos
pobladores, pobres vergonzantes los más, les asignó un pequeño lote y así formó
una población que delineó al estilo acostumbrado y a la que dotó de iglesia
dedicada a Nuestra Señora de Belén."
Si la ya floreciente población del Valle, hubiera
estado en la jurisdicción de Londres, habría sido fácil mudar a allá el título
de ciudad capital, pero no lo estaba, y para la nueva jurisdicción se debía
quitar a Tucumán su más valioso distrito, desmembrar también parte del
territorio de Santiago del Estero y La Rioja. Sin embargo, por Cédula Real del
16 de agosto de 1679, fue creada la provincia de Catamarca. Por entonces las
noticias no marchaban muy rápido; y así, recién en 1681 fue conocida la
decisión en estas tierras.
Aún pasaron más o menos dos años y en los días 21 o 22
de junio de 1683, luego de cumplirse diversas formalidades que hacían al caso;
incluso votaciones y cambio de ideas para la elección del lugar donde habría de
asentarse la nueva Capital, surgió al fin la PROVINCIA DE CATAMARCA, con el
bautismo de su capital ideal: CUIDAD DE SAN FERNANDO DEL VALLE DE CATAMARCA.
Se dice capital ideal, porque aun faltaba fijar
definitivamente su asiento. Lo que ocurrió el 5 de julio de ese mismo año,
cuando se puso el rollo o árbol de justicia, determinándose que tuviera 9
cuadras de largo y ancho..., etc.
muy linda historia
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